El Puente del Ran

Fotografías

        A medio camino entre Valaderrodrigo y Valsalabroso se cruza el Río de Las Uces por uno de los puentes más hermosos que conozco. Debe su nombre al apodo del hombre que lo mandó construir: El Tío Camilo "El Ran".Fue a principios de siglo -en 1904 según se dice en la canción del Torito Perdigón de Valderrodrigo-,cuando aquel, dueño del molino que había en ese lugar, decidió hacer un puente donde antes se pasaba por unos simples pontones. Según el Tío Adolfo, nieto del Tío Camilo y actual propietario del molino, todas las piedras del puente fueron arrastradas por una sola pareja de bueyes, uno de los cuales era el famoso "Torito Perdigón".Parece ser que éste procedía de Traguntía y aún conservaba la bravura suficiente para ser toreado, lo cual se hizo tras ser terminada la obra ,tal como se cuenta en la mencionada canción.

           En la orilla de Valsalabroso hay dos molinos uno junto al otro. El primero está totalmente en ruinas pero el más moderno aun se conserva bastante bien, aunque ya no muele. La presa está perfectamente construida y debió suponer un gran esfuerzo ya que sus dimensiones son realmente excepcionales  pues está situada transversalmente y en un lugar bastante llano, donde el cauce del río se extiende por todo el valle. Aún conserva las compuertas de madera perfectamente cerradas.

           A poca distancia del puente y desde los valles de Valsalabroso trae sus aguas hasta el piélago ( embalse de la presa ),el Regato de la Molinica. Éste debe su nombre a un pequeño molino situado ya cerca de Valsalabroso. Aún conserva su tejado pero su interior está totalmente abandonado. Parece mentira que en el lugar en que está y con el escaso cauce del regato se pudiera aprovechar el agua para realizar la molienda. Pero ya sabemos la paciencia, si no la necesidad, de las gentes que vivieron en estas tierras. Una  prueba de ello es el camino que, bajando al lado mismo del agua, ha sido separado de ésta con losas y empedrado todo él a lo largo de más de un kilómetro hasta llegar al río, como si de una calzada romana se tratara.

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